1. Escucha a tu instinto, tu intuición o tu voz interior.
Como adultos, estamos a menudo acostumbrados a seguir los hechos
y las cifras en lugar de escuchar a nuestra intuición.
La intuición puede hacerte tomar decisiones que otros crean
una locura pero sabrás, al final, que fue lo mejor para ti.
2. Confia.
Las personas que confían en sí mismas
generan e inspiran más confianza en los demás.
En otras palabras, cuando confías en ti mismo para seguir adelante con
tus propias promesas, otras personas saben que también pueden confiar en ti.
Los errores pasan pero es cómo actuamos después lo que crea y
define nuestro carácter.
3. No actues de acuerdo a cómo te sientes.
Los sentimientos no tienen una vida propia.
En otras palabras, puedes controlar cómo te sientes
si controlas lo que piensas.
Aquí está la ecuación: Tus pensamientos
producen sentimientos que impulsan tus acciones
y que determinan tus resultados. Fácil, ¿no?
Esto significa que puedes controlar tus sentimientos
según lo que pienses. Y cuando el éxito es la meta,
no puedes permitirte el lujo de llevar a todas partes la envidia,
los celos, la ira y la amargura.
4. Quiérete y quiere quién eres.
Hay una persona que nunca serás capaz de alejar de tu vida,
y esa eres tú. Si no te gustas a ti mismo, ¿cómo puedes esperar
que otros disfruten de tu compañía?
¿Quieres una relación permanente o tal vez mejorar uno ya existente?
Es hora hora de trabajar en la relación que tienes contigo.
Es hora de convertirte en una mejor versión de ti.
5. Manténlo súper simple.
Mantener tu vida sencilla traerá grandes resultados.
La vida es lo suficientemente compleja como para andar
creando más problemas y complicándolo más. Cuando sientas
que el mundo pesa en tus hombros, es el momento para simplificar.
No dejes de compartir con nosotros tus experiencias a través de este ejercicio de reflexión...!Mucha suerte! <3
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